La más reciente fotografía de intención entre quienes aseguran que sí votarían en una consulta de la derecha ubica a Miguel Uribe en primer lugar con 43,3%. Paloma Valencia se instala en el segundo puesto con 20,3%, mientras María Fernanda Cabal registra 18,2%. El grupo de “ninguno” alcanza 13,6% y “no sabe/no responde” se sitúa en 4,6% sobre una base de 649 casos.
El corte territorial confirma dinámicas diferenciadas. En ciudades principales, Uribe marca 36,5% frente a 26,7% de Valencia y 22,6% de Cabal. En el resto del país, el puntero amplía la ventaja con 45,6%, mientras Valencia cae a 18,0% y Cabal a 16,8%. Las submuestras fueron de 269 encuestados en capitales y 380 en regiones, suficiente para trazar brechas estables.
La ventaja de 23 puntos de Uribe sobre su más inmediata competidora sugiere un piso alto temprano y un reconocimiento de marca que le permite sostener la delantera en escenarios heterogéneos. El dato de 18,2% entre “ninguno” e indecisos configura un reservorio de cambio que, en consultas, suele activarse cuando la campaña ingresa a fase de contrastes y validaciones públicas.
El comportamiento por zonas también habla de estrategias. Uribe muestra capilaridad en corredores regionales donde pesan liderazgos locales, visitas y trabajo de base. Valencia crece en capitales con una conversación más urbana; Cabal conserva un núcleo disciplinado alineado con mensajes de seguridad y autoridad.
Con esta base, la consulta del Centro Democrático arranca con campo abierto para que la participación y los debates muevan el marcador. El tamaño del segmento “ninguno” e indecisos, cercano a una quinta parte, puede estrechar, confirmar o ensanchar la brecha dependiendo de la movilización y de la claridad programática.
Equipos de campaña proyectan incrementos de presencia en plazas y barrios, y ensayan contrastes temáticos en economía familiar, empleo y seguridad ciudadana, asuntos que hoy concentran la atención de los votantes probables. El reloj electoral, por ahora, favorece a quien ya tiene una ventaja reconocible.
Desde el partido se insiste en reglas claras para los debates y en garantizar condiciones logísticas homogéneas. En el entorno político, observadores señalan que el valor de una consulta es ordenar la oferta y presentar un ganador con capacidad de sumar hacia el centro.
En síntesis, la foto de octubre deja a Miguel Uribe con una ventaja sólida y a Valencia y Cabal disputándose el segundo lugar estratégico. La traducción de intención en asistencia será el examen final.






