El ataque se da en un contexto de creciente violencia y uso de drones explosivos contra infraestructura y estaciones de Policía en el Cauca
La Compañía Energética de Occidente (CEO) denunció un atentado contra su infraestructura de transmisión de alta tensión en el sector de Chayani, zona rural del municipio de Cajibío, Cauca. De acuerdo con el comunicado oficial, el hecho se registró el lunes 17 de noviembre, cuando un artefacto explosivo impactó una estructura clave de la red que abastece a varios municipios del norte del departamento. La empresa calificó el hecho como un ataque directo a la infraestructura energética y advirtió que este tipo de acciones comprometen la seguridad del servicio en una región que ya enfrenta múltiples desafíos de orden público.
Según la información divulgada por la compañía, tras conocerse la explosión se activaron de inmediato los protocolos de contingencia. Equipos técnicos de CEO ejecutaron maniobras de suplencia en la red, lo que permitió mantener la continuidad del servicio y evitar que el apagón se extendiera a los hogares y comercios de la zona. Sin embargo, la empresa reconoció que parte de la estructura quedó averiada y en condición inestable, mientras se espera la validación de las autoridades de seguridad para permitir el ingreso de las brigadas al sitio exacto del atentado.
Aunque hasta el momento no se han reportado daños directos a usuarios, la advertencia de la empresa es clara: más de 100.000 personas podrían verse afectadas si se presentan fallas adicionales en la red impactada por la explosión. La infraestructura atacada hace parte del sistema que soporta el suministro de energía para buena parte del norte del Cauca, por lo que cualquier nueva afectación podría derivar en interrupciones prolongadas del servicio en varios municipios. Por ello, la compañía insistió en que se trata de un hecho que trasciende lo técnico y entra de lleno en la categoría de atentado contra la seguridad energética regional.
En el comunicado, CEO reiteró que su prioridad es “salvaguardar la vida, garantizar la continuidad del servicio y preservar la integridad de la infraestructura eléctrica”. La empresa manifestó que sus cuadrillas se encuentran listas para ingresar a la zona, pero que solo podrán hacerlo una vez las autoridades militares y de Policía confirmen que existen condiciones mínimas de seguridad para el desplazamiento del personal técnico. Mientras tanto, el monitoreo de la red se mantiene de forma remota y con apoyo de centros de control desde otras localidades.
Este nuevo ataque se produce en medio de un clima de creciente violencia en el departamento del Cauca, donde en los últimos meses se han registrado atentados con explosivos, hostigamientos y acciones armadas contra estaciones de Policía y otras infraestructuras estratégicas. De acuerdo con reportes de prensa, en la misma zona se habría utilizado un dron cargado con explosivos que habría tenido como objetivo una estación policial, pero terminó cayendo en una finca del sector de Chayani, afectando la estructura de conexión eléctrica.
Para las comunidades rurales de Cajibío y de municipios vecinos, los hechos generan preocupación no solo por el riesgo de quedarse sin servicio de energía, sino también por la sensación de vulnerabilidad frente a los grupos armados que operan en la región. Líderes comunitarios consultados por medios locales han insistido en que la infraestructura eléctrica, además de ser un soporte para la actividad económica y el funcionamiento de los servicios básicos, es también un símbolo de presencia del Estado en territorios históricamente golpeados por el conflicto.
Las autoridades civiles y militares han rechazado el atentado y han anunciado investigaciones para identificar a los responsables. Aunque no se ha producido una atribución oficial, informes previos han señalado a estructuras de disidencias de las Farc como responsables de ataques similares contra estaciones de Policía y redes energéticas en el Cauca. En paralelo, la empresa hizo un llamado a las comunidades para que reporten cualquier situación irregular cerca de las torres o redes de transmisión y para que eviten acercarse al área afectada, dado el riesgo que supone una estructura dañada de alta tensión.
El atentado contra la red eléctrica en Cajibío se suma a la lista de ataques que ponen en riesgo la infraestructura energética del Cauca y mantienen en alerta a miles de usuarios en el norte del departamento. Las autoridades y la Compañía Energética de Occidente insisten en que proteger las torres de alta tensión y garantizar la continuidad del servicio es clave para la seguridad, la economía local y la calidad de vida de las comunidades rurales en Cajibío, Piendamó, Morales y otros municipios de la región.






