La detonación levantó la calzada en el km 42+150 y obligó a suspender el tránsito entre Los Llanos y Tarazá
En la mañana de este 19 de noviembre, la detonación de un artefacto explosivo en la vía que conecta a Medellín con la Costa Caribe obligó al cierre total de la troncal a la altura del sector Ventanitas, en el tramo que comunica a Los Llanos con Tarazá, norte de Antioquia. Según los primeros reportes oficiales, la explosión levantó por completo la calzada en el kilómetro 42+150, dejando un amplio cráter y una franja de la carretera intransitable, lo que hizo necesario interrumpir el paso de vehículos en ambos sentidos.
La Policía de Tránsito y Carreteras confirmó que el cierre es preventivo mientras se realiza la valoración de la estructura vial y se descarta la presencia de otros explosivos en la zona. Las autoridades de movilidad explicaron que miembros de los grupos antiexplosivos del Ejército y de la Policía fueron desplegados para asegurar el área y realizar las primeras labores de inspección técnica, con el fin de establecer el alcance del daño sobre la carpeta asfáltica y las condiciones de seguridad para usuarios y operarios.
De acuerdo con las versiones iniciales, habitantes del municipio de Yarumal y conductores que transitaban por el corredor fueron quienes alertaron sobre la detonación y el levantamiento de la vía en cercanías a la vereda La Candelaria, en un tramo que ya ha sido escenario de otros incidentes de orden público. La comunicación inmediata con las autoridades permitió activar los protocolos de cierre, la señalización de la zona de riesgo y la desviación del tránsito hacia rutas alternas para evitar que vehículos quedaran atrapados en el lugar del atentado.
Por el momento, no se reportan personas heridas ni fallecidas como consecuencia de la explosión, aunque varios vehículos quedaron detenidos a ambos lados del punto afectado, generando largas filas y retrasos en los tiempos de viaje. Las autoridades insistieron en que la prioridad es garantizar la vida e integridad de los usuarios, por lo que el restablecimiento del paso dependerá de los análisis técnicos de los ingenieros de Invías y del Ejército, encargados de determinar si es posible habilitar un carril provisional o si se requerirá una intervención mayor de la infraestructura.
En cuanto a los responsables, las primeras hipótesis apuntan a la posible participación de estructuras armadas ilegales con presencia histórica en el norte de Antioquia. En este corredor hacen presencia disidencias de las antiguas Farc, así como integrantes del ELN y del ‘clan del Golfo’, lo que complica el panorama de seguridad y obliga a las autoridades a manejar con prudencia las versiones sobre la autoría del ataque mientras avanzan las investigaciones de inteligencia y criminalística.
El cierre de la vía Medellín–Costa Caribe tiene un impacto inmediato sobre el transporte de carga y de pasajeros, pues se trata de uno de los corredores estratégicos que conectan el centro del país con los puertos del Atlántico. Empresas transportadoras han informado sobre reprogramaciones de viajes, incremento en los tiempos de recorrido y mayores costos operativos por el uso de rutas alternas. Los pasajeros, por su parte, han debido esperar durante horas, reacomodar itinerarios y asumir el impacto económico de la interrupción de la troncal.
Mientras tanto, el Ejército anunció reforzamiento de la presencia militar en el tramo Los Llanos–Tarazá, con patrullajes permanentes y acompañamiento a las labores técnicas que se adelantan sobre la calzada afectada. Las autoridades locales y departamentales han pedido al Gobierno nacional priorizar inversiones en seguridad vial y en infraestructura para este corredor, que en los últimos meses ha sido escenario de ataques con explosivos que generan temor en las comunidades y afectan la dinámica económica de la región.
Las autoridades recomiendan a los conductores consultar en tiempo real el estado de la vía Medellín–Costa Caribe y atender las indicaciones oficiales sobre desvíos y horarios de paso. El atentado en el sector Ventanitas, en jurisdicción de Yarumal, reabre el debate sobre la seguridad en la troncal Los Llanos–Tarazá y la necesidad de reforzar la presencia institucional en el norte de Antioquia para blindar este corredor clave hacia la Costa Caribe.






